
Son muchas las opciones anticonceptivas disponibles y, en ocasiones, numerosas afirmaciones en relación con alguno de estos métodos que son fruto de leyendas urbanas. ¿Quieres conocerlos?
MITO 1
Los métodos hormonales alteran la fertilidad: Estos métodos inhiben la ovulación, pero cuando se dejan, el ovario vuelve a su función normal. Si se ha estado 30 años empleándolos, los dejas y no ovulas, no es por su uso, sino porque tu cuerpo ya no ovula.
MITO 2
Los anticonceptivos hormonales regulan la menstruación: No lo hace. Cuando pones un anticonceptivo de este tipo, lo que estás haciendo es anular la función del ovario y con estas hormonas sintéticas hacemos un ciclo hormonal artificial.
MITO 3
La depresión no tiene nada que ver con los anticonceptivos hormonales: Hay mujeres a las que les puede dar depresión o quitar la líbido. Esto existe, es decir, pueden tener estos efectos, pero no se traduce en que ocurra siempre.
MITO 4
Con el anticonceptivo es frecuente tener efectos secundarios graves: Es infrecuente y además hay que utilizarlo en personas que no tengan riesgo cardiovascular.
MITO 5
El condón solo hay que ponerlo cuando se va a eyacular. Esto es falso. Además, no solo se relaciona con un posible embarazo no deseado, sino también con el contagio de enfermedades de transmisión sexual. Hay que ponerlo desde el principio hasta el final.